Juan, ¿cómo vas a celebrar la navidad este año? –Pregunta Felipe-,
Pues no lo sé, depende a dónde mis padres quieran ir de vacaciones o paseo –responde Juan-.
Ahhh, exclama Felipe, quien estudia en un colegio fiscal que no tiene misa, ni clases de religión ni retiros, etc. En cambio Juan sí, ya que sus padres son católicos y quieren para sus hijos la mejor educación tradicional, sobretodo centrada en valores.
La pregunta es vigente para nosotros los que celebramos cada año la navidad,
¿Cómo vamos a celebrar el acontecimiento más importante del año católico, el sentir y recordar que Dios no es un idea sino una persona, no está arriba, sino que se baja, no es lejano sino cercano y que no trae la guerra sino la paz y la alegría?
Este año te invito joven a pensar por ti mismo
¿Cómo quieres tú celebrar la navidad si tienes fe?
¿Cómo puedes contagiar tu fe a quien puede ayudar a dar paz, alegría y esperanza?
Una cosa está clara para las comunidades creyentes: si no reinventamos la forma cómo nos relacionamos con Dios y vivimos la fe, el cristianismo es cada vez más una cuestión de historia de las religiones y de puras reuniones de gente deprimida que vive con miedos y ansiedades y no de quién siente un fuego que arde en su interior y lo hace pensar en grandes proyectos en pro de su familia y la humanidad, lo hace pensar en Jesús como el modelo de humanidad y como esperanza de vida.
Para este primer domingo de adviento seguiremos los consejos del Papa Francisco, que nos invita a no tener miedo, salir de nosotros mismos y construir una Iglesia diferente, que responda a las necesidades y esperanzas reales de la gente, una iglesia en salida llama el Papa Francisco. Y la define, “como la comunidad de discípulos misioneros que PRIMEREAN, que se involucran, que acompañan, que fructifican y festejan” (EG.24)
Estos cinco verbos serán el itinerario que seguiremos estos 4 domingos de adviento para terminar festejando la navidad, dando una señal de esperanza de ser una Iglesia diferente que la construimos todos con nuestras actitudes, acciones y no solo oraciones.
PRIMEREAR, significa para el Papa adaptando un neologismo argentino, el sentir que el Señor tomó la iniciativa y la ha primereado en el amor (1Jn 4:10). Por eso el creyente que se siente parte de una comunidad, que es miembro vivo y no un mero certificado, se adelanta, toma la iniciativa, sale al encuentro de quien nos necesita, busca a los que están lejos y llega a los cruces de los caminos, no para dar limosna o chocolates, sino para estrechar la mano, contagiar un fuego de hermandad y esperanza.
Queremos un país diferente y con dignidad, que invita a los excluidos de la historia y de las comodidades de la globalización y tecnología para saber compartir y beneficiar a todos. Pero sobre todo sentimos un deseo inagotable de dar misericordia, ternura y alegría, que es el mensaje de Adviento, Navidad y fin de año.
¿Qué actitud podré sacar de mí mismo en este primer domingo de adviento para prepararme a festejar la navidad?:
¿De veras queremos cambiar la vida que llevamos?
¿Queremos vivir mejor, a plenitud y no en la mediocridad?
¿Podemos INNOVAR o nos contentamos con repetir esquemas y respuestas antiguas? ¿O meras reformas cosméticas y superficiales?
¿Qué acciones concretas haré para adelantarme a la vida, para hacer que las cosas sucedan y no dejar que sucedan cosas?
Este primer sábado de adviento los invito a comprometernos a tender nuestra mano amiga y solidaria de forma real y siempre dispuesta a dar y darnos más.
Mi oración, ¿será solo por mis necesidades, cercanos o por todos aquellos que me necesitan y no los puedo alcanzar físicamente, pero sí espiritualmente? ¿Puede la liturgia expresar la belleza de mi fe, intenciones, acciones y operaciones?
Reflexionemos:
¿Qué es la iglesia en salida?
Comunidad que da el primer paso, PRIMEREA lo que se necesita hacer. INNOVA más que renueva.
¿Qué debo primerear en mi vida y sociedad para innovar?
La respuesta es personal, pero es claro que ante todo no tener miedo y ser creativo.
¿Qué acciones concretar puedo dar para sorprender a otros con lo que digo creer?
Gestos de solidaridad concreta lo expresan mejor, sacar una sonrisa a niños.