Hay quienes dirán, nada, es vacaciones o, lo mismo de siempre: descansar, vagar, jugar etc. Lo, cierto es que ya está haciendo algo y allí ya puede encontrar un sentido a lo que hace si mira con más en profundidad.
Otros dirán, pues pienso hacer mucho, pienso ir a la playa con mis amigos y full diversión. Este es muy “avispado” y encuentra mucho sentido, pero desde su único interés pasarla bien.
Y alguno dirá, pues ir a misiones, a los grupos de la parroquia donde tendremos la ceremonia y compartimos la alegría de creer, el coraje de existir a la luz del ejemplo de Jesús que no sólo nos indica el camino a seguir, sino lo que es ser hombre, humano ir hasta el fin con los ideales propuestos en la juventud, para eso hay que tenerlos, este último grupo será el minoritario, pero existe.
El gran reto que tiene hoy el cristianismo o la Iglesia, que no es lo mismo en su significado, ya que esta última es responsabilidad de curas y monjas, papa y obispos según algunos, y el Cristianismo es el conjunto de todos los que profesan su fe en Cristo Jesús, como el que dio su vida por todos, el hombre para los demás, el gran reto es: ayudar a los jóvenes a encontrar un sentido a la vida, ayudándolo a trascender en sus sentimientos y acciones. Y no en el mero hecho de llevarlos a la Iglesia.
Si la Iglesia no muestra más interés por las cosas humanas, por los problemas del día a día en donde la gente se juega la vida, en donde se revela la rutina o la esperanza, la inercia o el saber manejar la vida, jamás ayudará a un joven o a ningún adulto a levantarse, a caminar con sentido, a vivir con Alegría y con coraje a superar las dificultades que nunca cesarán por el simple hecho de ser humanos, de ser finitos, de vivir en un mundo complejo.
Al joven hay que brindarle ofertas, no esperemos que venga a nuestras oficinas parroquiales, como si fuéramos simples burócratas, funcionarios de un ideal, hay que construir una nueva Iglesia, y el papa Francisco nos pide que sea en salida, pues si se queda encerrada se enferma, no sirve, y eso es lo que está pasando en muchas Diócesis.
Ahora bien si la familia no vive los valores de la fe que dice profesar, y simplemente se quedó en un rito, una tradición y peor aún, en una incoherencia de vida, pues es cristiano de papel, de número y de masa y no de convicciones, de ideales a seguir, transformar el mundo al estilo de Jesús o hacerlo más humano, entonces Sí que la juventud está en problemas, los referentes que le pueden dar trascendencia y sentido a la vida cotidiana, a forjarse un mejor camino no los ve, no los tiene a la mano, el tedio, el aburriendo es lo que aparece y aquí la facilidad de buscar alternativas como las drogas, el sexo, entre otras es muy fácil conseguirlo.
¿Joven que vas a hacer en Semana Santa? Las opciones son muchas. La respuesta sólo una, tú decides que quieres hacer de tu vida, y si dices calidad de fe, esta se muestra en acciones más que en palabras. Misiones en zona pobres en donde lo esencial no es meramente predicar sino el compartir, que los pobres se sientan queridos, trabajos comunitarios para levantar una escuela, casa es otra alternativa de vivir la Semana Santa, ayudar a los migrantes, hoy en Ecuador entran más de 4000 venezolanos por día, sin contar haitianos, cubanos, entre otros, ¿qué hacemos por ellos, es preguntarse qué hacemos por Jesús? Y aquí estamos trabajando por un derecho humano a movernos, a circular por el mundo como casa común.
Qué hacer en Semana Santa no encontrare respuesta si no tengo clara la pregunta, qué tipo de hombre, de mujer deseo ser para crecer, para vivir. Por. Fabro, SJ
Reflexionemos:
Que se puede hacer en Semana Santa?
Ser un poquito más humano, desde el servicio al otro. Por qué los jóvenes no les suelen interesar las actividades de Semana Santa?
Por qué los adultos de fe no han sabido contagiarlo
Cómo contagiar a un joven la fe?
Contagiando la Alegría de sentirse amado por Dios, que es el mensaje de la Semana Santa