Dos fiestas distintas con el mismo significado. QUE EL PODER DE DIOS SE HAGA REALIDAD EN NUESTRAS VIDAS E HISTORIA. Hay una sabiduría en el pueblo que desde hace muchos años o hace la gran procesión a Jesús del Gran Poder en Quito o tienen en sus casas un cuadro de Cristo Rey. Nuestro pueblo deposita en Dios Padre revelado en su hijo su confianza, solo en él está la vida, solo en él está la salvación, solo él tiene el poder, es rey.
Nuestro pueblo, también espera que ese Dios no le falle, sabe que los reyes y poderes terrenales fallan demasiado. Basta ya de tanto atropello, injusticias, corrupción, manipulación. Solo tú Señor diriges la historia, esa es la fe en el Dios de la vida, desde la sabiduría de Israel en el Antiguo Testamento, hasta las peregrinaciones o procesiones que hacemos a Jesús del Gran Poder o rezos a Cristo Rey. Es una fe inquebrantable, firme que se renueva cada fiesta litúrgica, en cada devoción particular o comunitaria.
Nuestro Pueblo sabe, que Dios es Misterio, no aparece esa justicia en nuestra tierra, los pobres, los migrantes, la gente sin poder sigue siendo atropellada y vulnerada, pero su fe es inquebrantable. Los estudios de los comportamientos sociales, ven en esto una cerrazón, un fanatismo producto de sus necesidades. Hablan de una fe infantil o nada ilustrada, hablan de una fe del carbonero. Pero tampoco la fe ilustrada ayuda a transformar el mundo, incluso hace componendas con los que tienen el poder, y no con el pueblo que delega el poder.
¿QUÉ MISMO CELEBRAMOS EN LA FIESTA DEL REY ETERNO Y SEÑOR UNIVERSAL QUE PROCLAMAMOS CRISTO REY? Veamos unos gestos de Jesús que nos pueden ayudar a comprender su entrega y el saber usar el poder divino desde los márgenes, la compasión y la incondicionalidad.
Jesús, jamás usó el poder para beneficio propio, para curarse él mismo o para ganar fama y tener éxito como nos gusta a quienes vivimos en un mundo de imagen, de marketing y de componendas y padrinazgo. Esto queda evidenciado cuando apartó a Satanás, el tentador, con dureza, la tentación también era muy apetitosa, Lucas nos cuenta en el capítulo 4: “Después lo llevó a una cima y le mostró en un instante todos los reinos del mundo. [El Diablo le dijo: —Te daré todo ese poder y su gloria, porque a mí me lo han dado y lo doy a quien quiero. Por lo tanto, si te postras ante mí todo esto será tuyo. Jesús le replicó: Está escrito que al Señor tu Dios adorarás y solo a él darás culto”. Hoy esta simple verdad, por quienes detentan el poder o dicen tener éxito sea civil o religioso, por lo general, no lo entienden y se fabrican su dios, adoran su ídolo, exaltan su fama. La tentación es fácil, actuar como Jesús, no lo es, pero la gente sencilla que expresa su fe en el poder de Jesús sea una imagen o una escultura nos dicen lo mismo que Jesús, solo Dios tiene el poder.
En la pasión de Jesús es en donde el poder de Dios se manifiesta como perdón, amor vulnerable y compasión. Ante la burla e incredulidad porque lo proclaman Rey, los soldados, las autoridades judías y hasta algunos del mismo pueblo se burlaban y lo retaban a que manifieste su poder y la confianza que manifestó durante toda su vida, “Si eres el rey de los judíos, sálvate. Encima de él había una inscripción que decía: Éste es el rey de los judíos. Uno de los malhechores crucificados lo insultaba diciendo: —¿No eres tú el Mesías? Sálvate a ti y a nosotros. Pero el otro lo reprendió diciendo: —¿No tienes temor de Dios, tú, que sufres la misma pena? Lo nuestro es justo, recibimos la paga de nuestros delitos; éste, en cambio, no ha cometido ningún crimen. Y añadió: —Jesús, cuando llegues a tu reino acuérdate de mí. Jesús le contestó: —Te aseguro que hoy estarás conmigo en el paraíso” (Lc 23). Hasta el final de su vida manifiesta su confianza en el Padre y ofrece alternativa de vida al ladrón que le pidió o reconoció que su reinado –espacio de poder- era distinto a lo que se vivía en esta sociedad.
La fiesta de Cristo Rey es una oportunidad para reflexionar sobre cómo estamos ejerciendo el poder religioso, político, económico o social, pero ante todo es una apuesta a comprender que la fe solo se entiende desde la historia, generando historia, dando esperanza a los que no la tienen y acompañando procesos de vida en vez de buscar espacios de poder. “Buscad ante todo el Reino de Dios y su justicia y todo lo demás, se dará por añadidura” (Mt 6,33). Como dice el Papa Francisco, citando a Paulo VI, “El Reino que se anticipa y crece entre nosotros lo toca todo: ya que el verdadero desarrollo solo es posible si toca a todos los hombres y todo el hombre”. (EG: 181)
POR:
P. Fabricio Alaña E, sj
PARA PENSAR:
¿CÓMO SE EXPERESA EN LA PIEDAD POPULAR EL PODER DE DIOS?
En sus devociones e imágenes como la de Cristo Rey
¿LA INSISTENCIA EN UN DIOS PODEROSO QUE NO DERRIBA LA SOBERBIA DE LOS QUE HOY TIENEN EL PODER ES FANATNISMO?
No, es no acoplarse a este mundo
¿CÓMO MANIFESTO JESUS SU PODER?
A través de un amor vulnerable, compasivo e incondicional.
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