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¿QUÉ NECESITAMOS?: ¿mesías? ¿líderes? O ¿ciudadanos?


Hagamos un ejercicio mental, pero desde los deseos. Deseamos salvar el país de la corrupción, del narco, de la violencia, de la inequidad, de la mediocridad, entre otros males. ¿Quién nos podrá salvar? Si eres de cultura religiosa, dirás EL MESÍAS, EL SEÑOR, pues tiene que venir del cielo para transformar la realidad.


La historia nos dice que los mesías han fracasado en su misión. Aquellos emperadores que se hacían llamar hijos de Dios, murieron, fueron autoritarios y ocasionaron mucha muerte; al final privilegiaron a las oligarquías de siempre. El pueblo siguió pobre y con pésima educación. Esos mesías modernos, han causado migraciones y humillaciones a su gente. No creo que uno de los nombres que puedas poner aquí sea exitoso. No hablamos de aquel que consideramos los católicos, el Mesías al revés, su proyecto histórico parece un fracaso, porque nos enseñó que se salva desde el servicio y no del poder, por eso se identificó más con el Siervo de Yaveh que sufre y no con David que goza desde el palacio.


Entonces, lo que nos dice la sociología y la administración de empresas es que necesitamos LÍDERES. Ok, veamos. Imagina de uno a tres líderes. ¿A quién pondrías? ¿Simón Bolívar? ¿Nelson Mandela? ¿Steve Jobs? Entre otros. Y por qué no pusiste tu nombre. Es que en nuestro imaginario el líder es el que sobresale y capitanea a los demás para conseguir metas y resultados, sacar adelante la empresa. Lo mueve un interés profundo, pero en el fondo su ego, su propio bienestar y sabe que no puede conseguirlo si no consigue que otros lo hagan y lo motiven por igual. El líder, inspira. sí, motiva, sí, empodera sí. Pero al final el éxito depende de uno solo que impulsa a los demás. ¿Qué pasa con los demás? ¿son solo seguidores? Ovejas los llama el evangelio. En nuestro país esos líderes solo se los encuentra en ciertos sectores empresariales, y en especial por su capacidad de innovar y conseguir réditos para su empresa. A nivel político-social no lo vemos con claridad. Políticamente hay corruptos y no líderes. Mediocres y no emprendedores. Ojalá aparezcan en las nuevas generaciones.


¿Quién PODRA SALVARNOS? Era la expresión de Chespirito y salía ¡Yo, el Cahpulin colorado! Creaba esperanza con humor. Hoy preferimos reír para no llorar, pero no sentimos esperanza por lo común, lo público, lo que es de todos. Ejemplo claro, lo que está pasando con la Amazonía y las concesiones mineras en nuestro oriente ecuatoriano. El pan que hoy se busca será el hambre de mañana. No importa, destruyamos los árboles, los ríos, la naturaleza con tal de incrementar la riqueza. El absurdo de hoy no tiene nombre: 500 por ciento de contaminación en los ríos del oriente en las zonas de la minería ilegal, once mil, sí once mil por ciento más de aumento de zonas de extracción. Vaya políticas socioambientales y de cuidado de la naturaleza.


LO QUE ES PROBLEMA DE TODOS, ES CUESTIÓN DE TODOS RESOLVER. ¡Eh, ahí la cuestión! No tenemos conciencia en su mayoría de ejercer nuestra responsabilidad común para resolver nuestros problemas comunes. En la pedagogía de la educación liberadora de Paulo Freire se decía: NADIE SALVA A NADIE, NOS SALVAMOS TODOS, pero para ello hay que cambiar el sistema educativo, no hay que llenar de datos a los alumnos, sino a pensar y sacar lo mejor de nosotros mismos. Hoy estamos peor, estamos INFOXICADOS ante tanta información que hay en el ciberespacio y en las redes. No sabemos pensar, requerimos que la Inteligencia Artificial piense por nosotros. Los colegios y las Universidades no forman, no están creando soluciones, sí tomando lo que hay en la red y creando posgrados que no aportan a solucionar los problemas del país.


Lo peor en lo que no educan es en la ciudadanía. Ser ciudadano es ser responsable de lo nuestro. Y lo nuestro es nuestra tierra, nuestra cultura, y nuestra historia. El futuro depende de nosotros, cuidar lo público es pensar cómo hacerlo viable para crecer sin destruir la naturaleza, para que el bienestar sea para todos y no solo unos cuantos.


Ser ciudadano desde una perspectiva existencial, es estar ubicados en el espacio y el tiempo. Como dicen las ciencias políticas es pertenecer a una comunidad y ejercer sus deberes y derechos. Esto quiere decir que es ciudadano el que vota, como el que pide cuentas a quién fue elegido. Ejemplo de esto lo tenemos en las comunidades campesinas e indígenas que defienden que el estado cumpla su misión de cuidar la naturaleza y de la justa repartición de sus riquezas.


Lo que necesitamos no son mesías, ni líderes, sino sujetos pensantes que se organicen y ejerzan su libertad y cumplan su misión de construir un proyecto nación donde se respete nuestra cultura y construyamos una historia que muestre que otra sociedad es posible si nos fortalecemos como ciudadanos.



POR:


P. Fabricio Alaña E, SJ



PARA PENSAR:


¿QUÉ TIPOS DE SALVADORES HA FORJADO LA SOCIEDAD?

Mesías y líderes.


¿QUÉ NECESITA UNA NACIÓN?

Ciudadanos libres y pensantes.


¿QUÉ ES SER CIUDADANO?

Ubicarte en el tiempo y en el espacio para forjar tu futuro.




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