Chris Gardner es un trabajador de San Francisco que pasa por una compleja situación en la vida. Sin trabajo, con dificultades en su familia… entonces tiene una conversación con su hijo pequeño. «Nunca dejes que nadie te diga que no puedes hacer algo» le dice… nos recuerda que en la vida tenemos que luchar por nuestros sueños, por aquellas cosas que intuimos que pueden llenar nuestro día a día. Que dan más sentido a nuestro caminar. No nos dejemos aprisionar por la mediocridad y apatía, pensemos a lo grande, intentemos vivir con intensidad. En busca de la felicidad, de Gabriele Muccino (2006).
Escribo para jóvenes, pero es imposible escribirles a ellos sin pensar en sus padres/madres de familia, y sus educador@s. Confieso, que cuando escribo me imagino la persona a quien escribo, algunas son personas concretas que he conocido y conozco en mi trabajo de educador, que luego trato de generalizar como cierto prototipo de diálogo que ayuda a otros. Uso la ficción para mirar la realidad desde otra perspectiva o la imaginación, como nos enseñó el Padre Pedro Arrupe, SJ para mirar el lado buen de las cosas o como lo hacía Jesús para impulsar grandes deseos y proyectos.
Hoy más que nunca, necesitamos darle sentido a la vida de muchos jóvenes, pero ese sentido no es deber de educadores o sacerdotes o religio@s, que no siempre estamos a la altura, sino y sobre todo de sus padres, que no siempre tienen tiempo, ganas o herramientas para ello. Pues, los chicos hoy son otra generación, otro chip que cada vez más “nano” los llevan a conectarse con el ciberespacio, cada vez más mega.
Los mejores formadores, consejeros y superiores que he tenido en la vida, son aquellos que han estado cerca o que he aprovechado su encuentro de pocos minutos con una profunda y sincera palabra: “sigue a tu corazón”, “ve por lo que anhelas”, “no te desanimes”, “representa”, “cuestiona”, “imagina a Cristo a tu lado”, “sigue adelante”, entre otras frases cortas que han dado sentido a mi actuar y me inspiran a caminar. Cada vez duele constatar que se pierde esa calidad humana en esos educadores, religiosos que están llamados a dejar huella, marcar la diferencia y su trabajo se confunde con el derrotero del activismo o han caído en las tentaciones que Jesús superó del éxito, del mal poder o de la pusilanimidad y bajeza humana.
Las noticias no ayudan a encontrar sentido en la sociedad ni en el mundo. Además de las abrumadoras noticias de robos, violencia, delincuencia. Cuando tratan de dar análisis u opinión, revelan para quién trabajan y no la búsqueda de la verdad a la que están llamados.
El pequeño diálogo entre Chris Gardner y su pequeño hijo, visualiza lo que escribía sobre los grandes amigos y consejeros que he tenido en mi vida. Eso es ser padre/madre espiritual, eso es ser formador, docente, maestro y maestra que saben forjar corazones e iluminar mentes. Eso es lo que necesitan nuestros jóvenes hoy escuchar y no que los abrumen con teorías y métodos sicosociales, que pueden ayudar, pero que son muy técnicos y poco humanos.
Hoy la educación y muchos padres exigen eso a sus hijos e hijas; se valoran por el uso de la tecnología o por indicadores cuantitativos que revelan cuánto invierten, qué prestigio consiguen, pero no producen ningún crecimiento humano y menos acercamientos a los que sufren.
Padres y Madres, ninguna máquina, ningún algoritmo, ninguna voz melodiosa como la de “Alexa” reemplazará tu mirada cariñosa, tu responsable voz de acompañar y educar a tus hijos, no dejes de saber dar el consejo oportuno que tu hijo o hija necesita. El secreto no está en saber muchas cosas, sino en la mirada tierna y en el tiempo que le dediques. Sigue el ejemplo de Chris Gardner y tantos otros maestros de la vida que supieron estar cuando más lo necesitaban los jóvenes, sus hijos.
Por
P. Fabricio Alaña E, SJ
PARA SEGUIR PENSANDO
¿CÓMO VIVIR LA CUARESMA?
Dándome tiempo para compartir la fe y la vida con mis seres queridos.
¿CÓMO ENCONTRAR SENTIDO A LA VIDA?
Compartiendo tus inquietudes con personas sabios y buenas que te encuentres.
¿CÓMO HACER POSIBLE EL CAMBIO?
Ve por él, sigue tus sueños e ideales.
Comments