El Optimista:
Claro que sí, esa es nuestra esencia humana, evolucionar, desarrollar, crecer. Solo hay que darle tiempo al tiempo y aprovechar las oportunidades.
El Pesimista:
Imposible, el ser humano es el único animal que tropieza con la misma piedra. Los datos sociales de los últimos tiempos lo dicen claramente. Un ejemplo: los dictadores de turno, sean políticos, religiosos o patriarcales, ¿cuál es el umbral del dolor que deben soportar para lograr la liberación de quienes están bajo su peso, mando o yugo? Ni cuentan se dan o no desean, el poder y la ambición los ciega.
El Indiferente:
Que no es ni pesimista ni optimista, simplemente ni le va ni le viene, y suele acoplarse a la mejor parte cuando los vientos soplan favorables, pero él no es actor sino que se deja llevar por los ritmos de la vida. Estas personas nos dicen, que todo depende y el ser humano puede ser mejor cuando le conviene o no por el mismo motivo, todo depende.
Ejemplo de personas buenas, de personas verdaderamente humanas, altruista sí que nos hemos encontrado, nuestros padres son un claro ejemplo de ello, en muchas ocasiones, los santos un ejemplo extraordinario de lo mejor de la humanidad, grandes personajes de la historia que han aportado por un cambio de vida para muchos: Ghandi, Luther King, ciertos grandes presidentes que lograron cuajar esos principios de humanidad que estructuren la libertad, el respeto a la persona, la preocupación por los pobres, los necesitados de la sociedad es un estimulante para el ser humano.
Nelson Mandela lo demostró con su vida, su paciencia y esperanza, la película INVICTUS nos da un buen resumen cómo un ser que tiene todas las posibilidades para vivir resentido y apartado con su etnia, no lo hace y solo desde la reconciliación con los grupos divididos puede conseguir la liberación y la paz.
La vida y la historia nos enseña que el dicho popular es verdad: “la cabra siempre tira al monte”. Es lo mismo que nos decía el relato del “águila real” el ser majestuoso de las alturas, cuando un huevo de águila real fue recogido por un agricultor y lo puso entre huevos de aves de corral, este creció como gallina y prefería caminar o encerrarse que volar y volar. El ser humano regresaría al monte de sus pasiones incontrolables con mucha facilidad y no despertar vivir, aletargado entre la violencia e inclemencia de siempre, como nos dice el grafiti: “La especie más desarrollada del planeta terminará por extinguirse si no encuentra pronto la cura para la peor de sus enfermedades: el odio y la intolerancia”.
Invito a repensar aquellas frases sueltas y bonitas que nos encontramos en el ciberespacio para que logremos conectarnos con nuestra real esencia: será optimista, pesimista, indiferente o verdaderamente sorprendente, pues realmente “aún no se ha manifestado lo que seremos”, aún no nos hemos descubierto:
“Ser un poco mejores: - nunca te justifiques a ti mismo con nadie. Porque la persona que te quiere no lo necesita y la persona que no te quiere no te creerá - No dejes que alguien se convierta en prioridad en tu vida. Cuando tú solamente eres una opción en la suya. Las relaciones son mejores, cuando son balanceadas. Cuando despertamos en la mañana tenemos dos simples alternativas: volveremos a dormir y soñar, o nos despertamos y perseguimos esos sueños. La elección es tuya.
Hacemos llorar a los que se preocupan por nosotros. Lloramos por aquellos que nunca se preocupan por nosotros y nos preocupamos por aquellos que nunca llorarán por nosotros. Esta es la realidad de la vida, es extraña pero cierta. Una vez te percates de ello, nunca será tarde para cambiar. No hagas promesas si estás contento. No respondas si estás triste. No tomes decisiones si estás enojado. Piénsalo dos veces, actúa sabiamente. El tiempo es como un río. No puedes tocar la misma agua dos veces, porque el flujo que pasó nunca pasará otra vez. Disfruta cada momento de la vida. Si vives diciendo lo ocupado que estás, entonces nunca serás libre. Si vives diciendo que no tendrás tiempo, entonces nunca tendrás tiempo. Si vives diciendo que lo harás mañana. Tu mañana nunca llegará”.
Por,
Fabricio Alaña E.
Reflexionemos:
¿Qué piensas de tu vida e historia que vas tejiendo día a día? ¿Es optimista, pesimista, indiferente?
La respuesta correcta será la que responda a la veracidad y evidencia de lo que afirmas.
¿Cuál es el mayor mal que los humanos nos hacemos?
El odio y la intolerancia.
¿Qué ejemplos tenemos de humanidad?
MARTIN LUTHER KING, NELSON MANDELA, y tantos anónimos en la bondad con amor. ¿puedes poner tres más?